Hace tres años sorprendió la noticia del fallecimiento de la agente Kerrie Orozco, asesinada a tiros en el
cumplimiento de su deber, el 20 de mayo del 2015.
Hoy, su recuerdo sigue vigente y su esposo Héctor y su hija Olivia han contribuido notoriamente para que
así sea.
Lo último que realizaron fue la donación de un caballo a la Unidad de Patrulla Montada de la Policía de
Omaha. Donación que fue gratamente recibida, bautizando al caballo como Orozco.
Lo que siguió fue unos meses intensos de entrenamiento para que Orozco pudiera estar capacitado para
patrullar la ciudad.
Al fin, después de un año, se llevo a cabo la ceremonia de graduación de Orozco, a la que acudió por
supuesto Héctor y su pequeña hija Olivia. También estubo el jefe de policía, Todd Schmaderer quien
afirmo que: “el recuerdo y respeto por la agente Orozco cada vez es más grande. Su esposo ha sido
todo un ejemplo y definitivamente es parte de nuestra familia”.
Héctor dijo que la idea de donar el caballo surgió por la falta de tiempo que tenia para cuidar al animal,
pues debía concentrarse en su trabajo y en el cuidado de su familia. Entonces, decidió entregarlo a la
mejor familia adoptiva que pudiera encontrar: El Omaha Police Department (OPD)
Feliz mente Orozco concluyo su entrenamiento y el OPD asegura que dará el menor cuidado a este
nuevo elemento, del cual dicen estar seguros que hará cosas importantes en la comunidad, junto a su
jinete, el oficial Nathan Waller.
“No conocí mucho a Kerrie, pero es todo un honor ser quien trabaje con Orozco. Es un animal muy dócil
y esta listo para trabajar en nuestra demarcación”, dijo.
Kerrie Orozco esta más presente después de su partida. Lo ha estado en los últimos tres años gracias a
su legado a través del programa PACE (Police Athletics for Community Engagement) y de diversos
eventos comunitarios. Y ahora lo estará también con ese más nuevo miembro de la patrulla montada que
recien se ha graduado: Orozco.