En Omaha, más de 135 asociaciones de vecinos activas se organizan bajo el colectivo de una alianza de vecinos como SONA. Fotos: Bridget Fogarty

Cada primer jueves del mes a las 7 p.m., los vecinos del Sur de Omaha se ponen sus cubrebocas en el Salvation Army Kroc Center, 2825 Y St., o encienden sus cámaras de Zoom para unirse a una reunión. Los residentes provienen de más de 35 organizaciones vecinales diferentes, pero colectivamente son una fuerza: la South Omaha Neighborhood Alliance, o SONA.

“Conocer a tus vecinos aporta seguridad, aporta colaboración, aporta comunicación y para mí, aporta un sentido de empoderamiento”, dijo Kimara Snipes, la actual Presidenta de SONA.

Una asociación vecinal une a sus residentes de la misma área de una comunidad para compartir ideas, organizarse sobre cuestiones en específicas y hace que sus vecindarios sean un mejor lugar en donde vivir. Las alianzas se conectan a los residentes de varias asociaciones bajo un mismo paraguas.

En Omaha, más de 135 asociaciones de vecinos activas se organizan bajo el colectivo de una alianza de vecinos como SONA.

Cada miembro de la asociación vecinal tiene un representante de su organización presente en todas las reuniones de la alianza. SONA tiene un equipo de liderazgo compuesto por miembros que trabajan juntos para ayudar a crear la visión de cómo la alianza trabaja en conjunto como grupo.

También es ideal para que los senadores estatales, miembros del consejo municipal y otros oficiales electos asistan y escuchen.

“La fortaleza de la asociación vecinal es identificar las cuestiones que están impactando a la comunidad” y actúan sobre ello, dijo Tim Pendrell, miembro del equipo de trabajo del Senador Mike McDonnell, quien representa al 5to distrito legislativo en la Legislatura de Nebraska.

En su rol, Pendrell proveé apoyo administrativo, como tomar notas durante las reuniones de SONA, “haciendo lo posible para ser útil” sin disminuir el nivel de liderazgo comunitario y los decisiones hecho por la comunidad, dijo él.

Hacer que los políticos acudan a los residentes de sus comunidades para escuchar sus necesidades de primera mano ha sido una prioridad desde el inicio de SONA, dijo Don Priester, un líder de SONA desde hace mucho tiempo, un exsenador estatal y un autoidentificado SOB – Chico del Sur de Omaha.

Si bien existe cierta colaboración fuera de la reunión real entre el equipo de liderazgo de SONA y los funcionarios electos de la comunidad, Preister dijo que “el público debe estar completamente al tanto de todas esas discusiones y el equipo de liderazgo debe tener una buena comunicación entre todos los grupos.”

El verdadero objetivo es hacer que los funcionarios electos sean más accesibles para sus ciudadanos, según Priester. Durante los muchos años de su participación, ha sido testigo de cómo los residentes aprovechan la oportunidad de “decir la verdad al poder” cuando los funcionarios electos están en la sala.

También es ideal para que los senadores estatales, miembros del consejo municipal y otros oficiales electos asistan y escuchen.

Construyendo SONA en la “Ciudad Mágica”

En un edificio en el campus de South Omaha del Metropolitan Community College (MCC) en las calles 27 y Q, las palabras “SOUTH OMAHA PEOPLE” están escritos sobre una placa. Palabras a continuación que cuentan su historia:

“La gente viajó de muchas tierras a este pueblo de la pradera que creció tan rápidamente. Se llamó la Ciudad Mágica. Los corrales de ganado y las plantas empacadoras de carne del sur de Omaha eran su destino de esperanza y oportunidad … Con trabajos bien pagados y sindicalizados, las comunidades de inmigrantes del sur de Omaha criaron niños, desarrollaron iglesias y clubes sociales.

De 1955 a 1971, los corrales de Omaha fueron el más grande del mundo: fue el hogar de “los Cuatro Grandes” empacadores de carne que se llaman Armour, Swift, Cudahy y Wilson.”

Pero esa fuerza laboral próspera no duró.

En 1965, los corrales y las plantas empacadoras de carne habían comenzado a plegarse, dejando atrás edificios abandonados y, en ocasiones, desplazando a familias en una comunidad mayoritariamente inmigrante que habían construido sus vidas en torno a esos trabajos sindicalizados con salarios dignos que alguna vez estuvieron disponibles. Muchos de los que luchan eran inmigrantes que no hablaban inglés.

Los residentes del sur de Omaha, Virginia Barajas, Homer Early y Sam Greenberg trabajaron juntos para formar la Asociación de Vecinos del Sur de Omaha. Tenían la esperanza de mejorar su comunidad al abordar los problemas que agobiaban a sus vecinos en un momento de transición para el sur de Omaha.

“Las personas no tenían una voz o una organización que les apoyare sobre cómo negociaban o como enfrentarse a las negociaciones laborales,” dijo Priester. “SONA brindó una voz para las minorías, para poder sentirse empoderadas, para continuar la transición de capacitar nuevos líderes y ayudar a los líderes de las asociaciones vecinales a trabajar dentro de sus vecindarios individuales para que los vecinos puedan tener una voz y puedan expresar sus preocupaciones a los oficiales electos, líderes empresariales y miembros de la comunidad que pueden hacer que cambien las cosas.”

En la década de los 90, los corrales estaban cerrando, y esa necesidad de organización colectiva del vecindario se volvió crucial, según Priester.

Él y un grupo de vecinos que había construido SONAR (Acción y Respuesta del Vecindario del Sur de Omaha) para abordar muchos problemas similares, se fusionaron con SONA en 1996 para crear la alianza oficial conocida hoy.

CONSTRUYENDO UN PLAN ESTRATÉGICO

Al igual que con muchas otras organizaciones, la pandemia puso en pausa muchos de los planes de SONA en marzo de 2020. Ahora, el liderazgo de SONA planea albergar conversaciones facilitadas para organizar su plan estratégico para 2022.

El liderazgo de SONA planea albergar conversaciones facilitadas para organizar su plan estratégico para 2022.

Aunque el plan se construirá junto con todos los miembros, una prioridad fundamental será reintroducir las asociaciones de vecinos en el sur de Omaha. Esto incluirá explorar cómo hacer que la membresía de SONA sea multigeneracional y cómo llegar a las comunidades de inmigrantes del sur de Omaha a medida que Omaha crece para convertirse en “el centro de inmigración más aparente” del Heartland estadounidense, según un informe reciente de Heartland Forward.

“Queremos asegurarnos de llegar a todos, a todas y cada una de las personas”, dijo Snipes.

El plan estratégico también llega en otro punto de transición en South Omaha. El desarrollo de viviendas Southside Terrace está programado para pasar por una remodelación importante.

Las promesas de llegar a toda la comunidad vienen con sensibilidad cultural y el arduo trabajo de un sondeo profundo de puerta a puerta y la construcción de relaciones personales, según Snipes. Este tipo de alcance para conocerlo donde se encuentre puede comenzar con grupos que ya están a la vanguardia de ese trabajo de trabajar con inmigrantes, dijo Snipes.“Nuestro desafío es encontrar más formas de ayudar a las personas que ya están luchando por tener tiempo y recursos para dedicarse a otra cosa que no sea la supervivencia”, dijo Priester. “Queremos que prosperen, no solo que sobrevivan”.

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